Escribir ficciones
Poco a poco voy preparando las maletas para volver a casa y esto supone repasar archivos, cajas, cajones, armarios, dobles fondos y mirar incluso debajo de la cama. Y justo bajo un adoquín he encontrado un texto elaborado hace dos años: una vez entrevisté a Joaquín Jordá en su casa del Raval.
"Hablar de la figura del guionista en una película documental es una ficción absoluta. Lo que existe es la figura del documentalista, del informador, del recopilador de materiales. Que hay que llamarle guionista por ponerle un nombre, pues vale. Pero en realidad esa figura es la de un investigador, que generalmente es el propio realizador y su equipo de trabajo.
En mi caso, suelo partir de un tema sobre el que quiero profundizar. Después hay un trabajo amplio de documentación; no se trata de escribir un guión escena por escena, sino de saber todo lo posible sobre los personajes, los espacios donde se va a filmar y el tema de investigación. Todos estos datos marcan una cronología de trabajo, que va a servir sobre todo para que el equipo de producción organice el rodaje. Pero el proceso es muy abierto, e incluso debe forzarse esa apertura e incorporar a la filmación cualquier cosa imprevista que ocurra y que en un principio ni siquiera había pensado que pudiera formar parte del documental. Se trata de ir descubriendo la película a medida que se va filmando".
"Hablar de la figura del guionista en una película documental es una ficción absoluta. Lo que existe es la figura del documentalista, del informador, del recopilador de materiales. Que hay que llamarle guionista por ponerle un nombre, pues vale. Pero en realidad esa figura es la de un investigador, que generalmente es el propio realizador y su equipo de trabajo.
En mi caso, suelo partir de un tema sobre el que quiero profundizar. Después hay un trabajo amplio de documentación; no se trata de escribir un guión escena por escena, sino de saber todo lo posible sobre los personajes, los espacios donde se va a filmar y el tema de investigación. Todos estos datos marcan una cronología de trabajo, que va a servir sobre todo para que el equipo de producción organice el rodaje. Pero el proceso es muy abierto, e incluso debe forzarse esa apertura e incorporar a la filmación cualquier cosa imprevista que ocurra y que en un principio ni siquiera había pensado que pudiera formar parte del documental. Se trata de ir descubriendo la película a medida que se va filmando".
4 comentarios
caja -
Esa es la televisión que a mí me gusta.
Erri-Berri -
Te cuento que hace dos o tres martes, pasada la una y media de la mañana, Fernando Sanchez-Dragó (que tras la caída del PP del gobierno central ha trasladado su programa a Telemadrid: "Las noches blancas") invitó a su programa a Fernando Arrabal. Como era la feria de San Isidro, dijo, había invitado a seis "banderilleros", escritores varios de entre 30 y 70 años, para que le diesen caña literaria. Recordando la que lió Arrabal en otro programa suyo, borracho, cuando se cayó varias veces y se quitó los zapatos, le dio un chupito de whisky nada más comenzar el programa, que el otro degustó con una sonrisa de niño.
Tras hora y pico de indescifrables conversaciones y referencias (de Houllebeq para arriba), llegó la hora de la despedida. Sánchez Dragó le dijo que había lleado las mesas de pasteles de nata (y así era) porque sabía que a Arrabal le gustaban las viejas comedias mudas y que eguro que no le importaría acabar a tartazos. Y así fue. Dragó le encasquetó una tarta en la jeta a Arrabal y éste, con la sonrisa de niño, hizo lo propio con el presentador. Los "banderilleros" empezaron entonces a darse tartazos.
Créditos.
Teletienda.
caja -
"El caso Raval", escrito por Arcadi (publicado en la serie gris de Anagrama) es uno de los libros periodísticos más alucinantes que he leído. A la altura de "A sangre fría" de Capote.
Y recuerdo con gran cariño las intervenciones demoledoras de Arcadi en el programa del gran Sánchez Dragó.
Anónimo -